Mi naturaleza me impide renunciar al ideal romántico. Los tropiezos duelen, sí; pero, también, dejan grandes enseñanzas. Las situaciones más hermosas de la vida ocurren como por casualidad, llegan sin buscarlas. Un día, volteas hacia atrás y no sabes ni cómo llegaste ahí, solamente sabes que no quieres soltarte. OHGG, Octubre 2018 No; me niegoSigue leyendo «Sin Renuncia»