El inicio de la pandemia trajo una vida de fantasía. La almohada se sentía en luna de miel, el cuerpo agradecía las horas extra de sueño y teníamos más tiempo para dedicarle a nuestra casa, a nuestras mascotas y a nosotros mismos. Todo era color de rosa. Acostumbrándonos a la pandemia Todos pensábamos que elSigue leyendo “Crónica de una pandemia sin chela”